Categoría: Aprendiendo sobre vinos
Actualizado al: 13/12/2024
¿Sabías que la diferencia entre un espumante y un vino tranquilo radica en las burbujas? Descubre cómo se producen y cuándo disfrutarlos.
Los vinos espumantes, como el Champagne o Prosecco, se caracterizan por su efervescencia, resultado de una segunda fermentación que atrapa dióxido de carbono en la botella. Son festivos, ideales para celebraciones y brindis.
Por otro lado, los vinos no espumantes, también llamados tranquilos, no contienen burbujas perceptibles. Aquí se encuentran los tintos, blancos y rosados tradicionales, perfectos para maridar con una amplia variedad de comidas.
Ambos estilos tienen su encanto. Mientras los espumantes añaden un toque festivo, los vinos tranquilos ofrecen versatilidad para cualquier ocasión.