Categoría: Tips sobre Vinos
Existen muchas variantes en los vinos, desde colores oscuros, lágrimas, intensidad o equilibrio. Estas cualidades ayudan a reconocer los mejores productos en el rubro del vino.
Si creías que todos los vinos en copa te parecen iguales, estás equivocado. Cada vino posee cualidades únicas que lo diferencian del resto. Esto tiene que ver por distintos factores: el proceso de elaboración, la forma de reposo, el tipo de cepa, el embotellado, entre otras cosas.
Actualmente, podemos encontrar una extensa variedad de vinos, es por eso, que expondremos ciertos consejos/tips para que puedas comenzar a definir y diferenciar cada vino que desee degustar.
Una vez abierto, es posible que desees comprobar el corcho en busca de pistas sobre si ha afectado el vino. Simplemente huélelo y si notas algún olor desagradable el vino estará estropeado, en caso contrario puedes servirlo.
Para los vinos blancos, aunque el tipo de uva puede influir en esto, mientras más oscuro el color, mayor el tiempo de envejecimiento del vino, así que si ves un vino muy pálido, probablemente es un vino muy joven. Cuando un vino es añejado en una barrica de roble, esto agrega también oscuridad e intensidad al color.
Similarmente en los vinos tintos, las barricas de roble y la edad, así como el tipo de uva utilizada, pueden hacer el vino más oscuro. Aunque generalmente la edad hará que los vinos tintos tengan una apariencia marrón o color teja.
Observa el vino, especialmente en los bordes y observa si el color cambia del centro a los bordes.
El siguiente paso es oler el vino. Puedes si lo deseas oler el vino antes de agitarlo, para saber cómo cambia después de hacerlo girar en la copa.
La principal razón para agitar el vino es para brindarle mayor contacto con el aire y por lo tanto con oxígeno y con más espacio para que los aromas se abran y lleguen a tu nariz fácilmente.
Para los catadores de vino sin experiencia, les puede llevar varios meses y mucha práctica comenzar a percibir los diferentes aromas que tienen diferentes vinos.
Después de hacer girar el vino en la copa podrás observar algunas "lagrimas" en la copa, resultado de un mayor contenido de glicerol (alcohol), aunque también de un mayor residuo seco. Los vinos con lágrima se suelen asociar a vinos de buena calidad.
Los vinos pueden tener muchos matices diferentes, de cualquier forma, los vinos en síntesis tienen cuatro "piedras angulares" o componentes básicos: sabor, alcohol, taninos y acidez.
Así otra característica de un buen vino de calidad es que ninguno de los cuatro componentes anteriores destacará, es decir se mantendrá en equilibrio, todos tendrán igual presencia o buen balance.
Por el contrario un mal vino, no será equilibrado y destacará en una de los cuatro componentes: o demasiado alcohol, o acidez, o demasiados taninos pueden hacer un vino duro y desagradable, o incluso un sabor apagado que hará el vino aburrido y poco interesante.
Existen dos fuentes principales de taninos en el vino. Primeramente el roble: si el vino es añejado en barricas de roble obtendrá algunos taninos de ello. Sin embargo, la fuente principal de los taninos en el vino proviene de la piel, tallo y semillas de las uvas, lo cual explica por qué es más probable encontrar taninos en vinos tintos (los cuáles son producidos triturando la uva completa e incluso en ocasiones el tallo también) que en vinos blancos, los cuales se producen fermentando solamente el jugo.
Los taninos son importantes ya que brindan color, estructura y sabor. Generalmente los vinos con muchos taninos deben ser añejados; con el tiempo los taninos se reducirán lo cual le brindará al vino mayor cuerpo y estructura.
Existen cuatro tipos de ácidos presentes en el vino, y su misión consiste en ayudar a preservar el vino, y también en ayudar a formar sabores y regusto, lo cual le da estructura.